Pulsera Roja de la Cábala: Un poderoso amuleto de protección

El uso de la pulsera roja se ha mantenido a través de los siglos entre los practicantes de la Kabalah, la sabiduría espiritual más antigua que conoce la humanidad. Haciendo honor a su significado en hebreo antiguo (significa tradición y transmisión),  la Cábala ofrece este conocimiento, usado durante siglos, para ayudarnos en nuestra evolución.

El hilo rojo, al igual que todos los amuletos, debe colocarse en el lado izquierdo de nuestro cuerpo, puesto que la mano izquierda es el lado receptor del cuerpo y el alma: recibe energía, recibe los dones a los que estamos llamados y además es nuestro hemisferio más espiritual. Por tanto, recordad que siempre que sea posible es importate llevarlo en el brazo izquierdo. Así, la energía protectora del amuleto entrerá en nosotros, sellando nuestra propia energía interior a la vez que intercepta las influencias negativas que existen en el exterior.

Según el Zohar, el libro sagrado de la Cábala, "Una persona que posea "mal de ojo" lleva consigo celos y envidia, una fuerza destructora. Protégete y no te acerques a esta persona. Podría hacerte daño". Cuando estamos con personas que destilan odio, envidia, etc. estamos enviando una energía negativa hacia ellos, y viceversa. La pulsera roja nos protege de estas miradas conscientes e inconscientes.

La pulsera roja en la muñeca de todas las estrellas

El hecho de que el hilo deba ser llevado a la tumba de Rajel, proviene de la creencia que la energía espiritual revelada por un Tzadik (es decir, una persona justa) durante su vida se mantiene presente en su tumbas, de modo que influye de forma positiva en el hilo que allí es llevado. Durante el ritual, el hilo es bendecido y desde allí se envía a todos los lugares del mundo.


Rajel representa el mundo físico en el que vivimos, es la Madre de Todos. Rajel era la esposa de Jacob y, tras años de esterilidad, dio a luz a dos hijos Yosef y Benjamín. Durante el nacimiento de Benjamín, Rajel falleció y fue enterrada en el camino entre Jerusalem y Belén, en la tierra de Israel.

Durante la vida de Rajel, su más grande deseo y propósito fue el de proteger y defender a todos sus niños de la maldad. Al conectar esta pulsera a su energía y llevarla en nuestra mano izquierda, nos envolvemos en la misma energía protectora.

La Tumba de Raquel (Rajel)

No obstante recordad que, aunque llevemos un amuleto de protección, incluso uno tan poderoso como este, debemos tener presente siempre que no hay que abusar de los regalos divinos. Llevar una protección no significa que debamos descuidarnos, apartarnos de llevar un camino espiritual recto o procurar aprender cada día más como transmutar a cada momento lo negativo en positivo, sino bien al contrario, esta es una ayuda para hacernos el camino de tu evolución más llevadero y próspero.

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